César. Pues sí, parece que esto se acaba. La primera de las señales la tuve el domingo volviendo de Barajas, no guantes, no ropa en condiciones, aterrizaje en casa castañeando (dos minutos para despegarme de los lomos de la vespita). La segunda de las señales la tuve ayer, cuando bajas la visera del casco y se te empaña el cristal...malooooo, malo. Chaval, te has quedado sin verano. Todavía esta mañana le daba algo de crédito al verano, el de san miguel, san marcial o san apapucio... pero no, qué va. Tras la charla (acento madrileño a morir) entre los dos mensajeros en la entrada de mi curro, me ha quedado muy claro que toca lavar la ropa de invierno. - joder macho, se me han quedado los mocos colgando como dos calipos- - ya te digo tronco... a mi me están saliendo escamas- - y la cara de merluza también...no te digo... ta la joooosaaaa..- ...o algo así. Así que, qué mejor que un poquito de verano, no? Temazo...